La Casa Fuerte Bezmiliana, construida en 1766 por orden de Carlos III para protegerse de la piratería, es un emblemático bien de interés cultural y patrimonio histórico de España. Originalmente un edificio defensivo y más tarde casa cuartel de la Guardia Civil, destaca por su funcionalidad y falta de decoración. Tras una rehabilitación en 1992, se convirtió en un espacio cultural con exposiciones y conciertos. Sus jardines, fuente y estatua del Rapto de Europa la hacen un lugar ideal para visitar, convirtiéndola en un destino cultural y turístico imprescindible en Rincón de la Victoria.