El Molino de Montosa, conocido también como Molino Alto, está ubicado en la ladera de una colina cerca del núcleo urbano de Sedella. Su existencia data al menos desde 1752, y fue el único molino en el pueblo en esa época, movido por agua y con un solo juego de piedras. Durante el siglo XIX, la creciente demanda de harina, causada por el aumento de la población, llevó a la apertura de un segundo molino en el pueblo. A finales de los años 50, el molino cerró debido a la emigración y la importación de harinas industriales.
En 1994, el Ayuntamiento adquirió el molino y comenzó su restauración. El edificio tiene una planta rectangular de 15m de largo por 4m de ancho, con una fachada irregular que presenta seis vanos. Los muros son de mampostería con piedra y ripios cerámicos, mientras que la cubierta fue completamente renovada durante la restauración, usando vigas de madera y tejas árabes. En el interior, el molino tiene una planta baja con una sala principal, una sala de molturación en un altillo, y suelos originales de mazaríes.