Sendero Bosque Las Morillas

Distancia: 5,3km (rita circular) / Duración: 1h45 / Dificultad: media-baja

Iniciamos el recorrido junto al polideportivo municipal “El Ejido» .
Continuamos por una pista de tierra, durante 1 Km. aproximadamente. Al fondo a la derecha podemos contemplar unas excelentes vistas de Alfarnate, rodeado de impresionantes montañas: Sierra de San Jorge, Tajo de la Palomera, Sierra del Jobo, Cerro del Castillejo. El carril discurre en terreno pedregoso, calizo, encontrándonos almendros, encinas y otros arbustos en los alrededores.

A la subida del primer repecho encontramos un repetidor de T. V. coronando el “Morrón del Aguila”. Desde este punto se divisa Alfarnate y Alfarnatejo. Desde aquí iniciamos un descenso a la derecha a través de una vereda que se encuentra entre una hilera de chaparros a la derecha y matorral a la izquierda hasta llegar donde se sitúan las ruinas del cortijo del “Lagar de Olmedo”. Desde ahí torcemos a la derecha y seguimos bajando por un carril que parte desde el cortijo y recorre un frondoso bosque mediterráneo. Este carril conecta con la carretera de Alfarnatejo-Alfarnate que tomaremos en dirección a Alfarnate para llegar hasta la Venta de Alfarnate.

Iniciamos el descenso por una vereda hasta llegar a la senda que conduce al bosque de las morillas, donde se enlaza con el sendero P.R. “Santo Cristo-Las Morillas”.

Desde la venta de Alfarnate, nos dirigimos a Alfarnate recorriendo unos 250 m. Al lado de la carretera, para desviarnos en la primera curva a la derecha y entrar en un prado que conduce al bosque de las morillas, cruzando el arroyo y torciendo a la izquierda. Nos acercamos al bosque de las Morillas a través de una senda delimitada por un cercado de piedra. Unos metros más adelante giraremos a la derecha para conectar con otra vereda que atraviesa en parte el bosque de Las Morillas.(enlace con el Sendero P.R. “Santo Cristo-Las morillas”.) Al recorrer esta vereda podemos observar con detalle la riqueza en especies vegetales de este bello paraje.

El camino se torna pedregoso a medida de que nos acercamos de nuevo al pueblo de Alfarnate, para concluir nuestro recorrido a la altura de la zona conocida como Pozo Rincón.